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De Ratones de Hangar a
Amigos del Museo
por Julio Salvo
fundador
Nuestra idea es hacer una breve historia de este proceso para
que se entienda como se fue gestando.
Varios años atrás va surgiendo lo que se inicia como un
pequeño grupo, liderado por el empuje de Eduardo Luzardo, con su bagaje de
conocimientos y documentación, y con el apoyo internacional, representado en la
figura de Gary Kuhn, con el cometido en un principio, de realizar un
relevamiento y registro fotográfico de las aeronaves civiles existentes en el
país, su estado y condiciones de mantenimiento en el momento actual, teniendo
como referencia fundamental la documentación de “Archive” de Air Britain, enviada
desde Gran Bretaña al amigo Luzardo.
Las tareas se inician en Melilla lográndose recabar abundante
documentación al respecto, y donde resultó fundamental la labor de Martín
Blanco.
Con más dificultad se obtienen datos de Carrasco, y comienzan
a recorrerse aeropuertos y aeroclubes del interior, aquí al amigo Martín se une
el incansable Tabaré Ifrán, conocedor del ambiente y siempre dispuesto a
emprender alguna gira para ampliar nuestra base de datos.
También se aprovechan festivales internacionales, (Jagüel,
Colonia, Adami, etc.), para además de disfrutarlos, libreta o cámara en mano,
anotar matrículas, o lograr la foto correspondiente de las aeronaves presentes.
Las visitas organizadas por IPMS a BA1 en Carrasco, a BA2 en
Durazno, Laguna del Sauce, EMA y ETA o los festejos del Día del Patrimonio en
EMA, ayudan a complementar la documentación en lo referente a FAU y Av.Naval...
Comienza entonces a surgir un interés ya no sólo en el
documento fotográfico, sino en la investigación: "tal avión preservado en
tal lugar, ¿es realmente el matrícula XX, o se le pintó otra, y si fue así,
cuál es la verdadera?, así nació la investigación sobre la "Historia de
los Chipmunk", con la colaboración de compañeros como Fernando Cerovaz,
Grasso y Fernando Díaz entre otros, y contando con el visto bueno de la
Dirección del Museo para obtener datos de las aeronaves del mismo.
Aquí debemos destacar el apoyo internacional, con el aporte de infinidad
de documentos vía mail, y el papel de Gary Kuhn como "director de orquesta"
en este proceso.
Es por esa época, (junio de 2003), cuando finalizado el informe, Gary nos manda
su ya famoso mail, donde piensa que "la tarea del equipo Ratones de Hangar
va a continuar...", el simpático apodo nos cae bien y lo adoptamos como
nombre del grupo...
Se continúan las investigaciones, ahora es la historia de los
Ryan Navion, con importantes aportes de Luzardo, Díaz, Martín, y varios otros,
y resultando fundamental la muy completa documentación de los libros del
historiador Juan Maruri, (sobre la aviación militar y civil en el país), que se
convierten en sitio obligado de consulta.
Al mencionar a Maruri, corresponde recordar los excelentes
artículos del amigo Nelson Acosta sobre la Aviación Naval, publicados en Gaceta
de la Aviación, otra fuente de profusa información.
Fernando Díaz había publicado una valiosa recopilación sobre
la historia de los Waco, Tabaré Ifrán la realiza sobre los Cessna 182, y
saltando a días recientes Rolando Grasso presenta su libro sobre la Historia de
los AT6..., distintas personas, distintas fuentes, pero un mismo fin,
conservar, rescatar, preservar la historia aeronáutica del país.
Debo resaltar aquí la importancia que tuvo la vinculación con
la excelente página “Memorias del tiempo de vuelo”, en una primera etapa como
lugar para exponer nuestros trabajos, y posteriormente para instalar un foro,
que nos sirviera como forma de intercambiar ideas, pero sobre todo hacernos
conocer, e incluso tomar contacto con personas con similares intereses en
distintos lugares del planeta.
Desde hace un mes el foro tiene su sitio y administrador
propio, pero siempre recordaremos este inicio.
Quiero hacer hincapié en un hecho fundamental que fue el
ingreso de Eduardo Luzardo al Museo Aeronáutico, para organizar la biblioteca
un año atrás, lo que marca un antes y un después de nuestra historia, ya que de
alguna manera se nos abren las puertas a todo el grupo, contando desde el
inicio con el respaldo de su Dirección, primero con Varela y ahora con
Rodriguez, autorizándonos a reunirnos sábado a sábado, ésta pasa a ser nuestra
planta física, y fuente de futuros proyectos, con la integración de nuevos
compañeros como Quirós, Wilman, Piñeyro, “Foxtrot” Figueroa, Sebastián…, por
citar a algunos, que se suman con su empuje y entusiasmo a los antes
mencionados.
Este contacto con el museo nos plantea como mejorarlo, la
eventualidad de lograr una nueva y mejor ubicación, la posibilidad de restaurar
aeronaves que hace mucho tiempo se encontraban en depósito, caso del Stinson
108, y un antiguo planeador, ambos actualmente en proceso de restauración, más
otro material valioso que debe ser puesto en condiciones para ser exhibido,
Ahora se busca consolidar lo realizado y entrar en una nueva
etapa, en el marco jurídico de la Asociación Amigos del Museo Aeronáutico,
(AAMA), que seguramente nos permitirá trabajar con otro respaldo, seriedad y
nuevas perspectivas…
Sin embargo, y esto debe quedar bien claro, si bien podrán
existir algunos cambios formales, seguiremos siendo el mismo equipo “Ratones de
Hangar”, con idénticos propósitos, y con el mismo idealismo que nos llevara ya
algunos años atrás, a acercarnos a alguna aeronave con unción para
fotografiarla, o admirarla en su carrera de despegue…
Julio Salvo
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